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El investigador de la Comisión Nacional de Energía Atómica de Argentina, Galo Soler Illia, presentó su trabajo en el IF de materiales inteligentes nanométricos, una línea de investigación que “junta la física, la química y la biología para imitar a la naturaleza y crear materiales únicos y novedosos”.

Galo Soler presentó la charla Materiales inteligentes formados a partir de bloques de construcción nanométricos el pasado 24 de agosto en el auditorio Alejandra Jáidar, donde explicó que su área de investigación son los materiales mesoporosos (aquellos con poros de 2 y 250 nanometros de diámetro), a los cuales incrustan partículas con características específicas, como aislantes, conductores o polímeros para que formen un nuevo material.

“Nuestro interés está en que el todo supere la suma de las partes, como sucede en la naturaleza, donde diversos organismos coexisten en un solo lugar. Por ejemplo, en una célula, donde los ‘seres’ que la habitan se comunican, trabajan e interactúan de manera dinámica sin desaprovechar las propiedades que cada uno tiene. Ese es nuestro punto de partida para la construcción de materiales inteligentes”, declaró el investigador.

Los nanomateriales son productos que pueden utilizarse en la tecnología como transistores, tubos o fibras a una escala menor a los 200 nanómetros, por lo cual su aplicación sería un gran paso para la reducción en tamaños de las máquinas como detectores, aparatos de medición o de observación, además tienen la capacidad de adherirse unos a otros, como si se tratara de piezas de lego.

Como construir un edificio

De acuerdo con Galo Soler, hacer materiales inteligentes con nanobloques es similar a construir un edificio en tres pasos. Primero hacen una arquitectura del nuevo material a partir de simulaciones computacionales, esto les sirve a los investigadores para seguir un patrón de diseño de los “bloques”. Posteriormente, seleccionan un elemento, por ejemplo el carbono, y rellenan sus zonas porosas con elementos diferentes para combinar diversas propiedades como aislante con conductores, súper conductores, entre otros, a este segundo paso Galo lo refirió como “decoración”.

Finalmente, y de acuerdo con el investigador, viene la parte más compleja: la interacción de la nueva nanoestructura con su entorno. “La interacción es algo sumamente complicado porque hay muchos factores que pueden alterar las capacidades de los materiales, por eso nuestro interés es, justamente, en hacer los materiales inteligentes que detecten su entorno”, explicó.

Para perfeccionar este proceso, el grupo de investigadores de Galo, en Argentina, se enfoca en analizar cómo las zonas porosas de los materiales aceptan o no la entrada de un elemento externo, pues hay materiales que no son compatibles entre sí porque no concuerdan con el tamaño y número de poros.

Es como si intentáramos juntar dos piezas de lego del mismo lado, si no concuerdan los hoyitos con las zonas que sobresalen, no se juntan y no forman nada nuevo.

“Lo que intentamos hacer es que los poros sean inteligentes para que determinadas partículas se queden ahí –o pasen por ahí- y otras no, como el cadenero de un antro, donde el cadenero es el poro. Perfeccionando esto podemos hacer prácticamente una química de objetos. Estaríamos más allá de sintetizar materiales, estamos generando sistemas”, declaró.

Según Galo, mientras más se estudien y más se conozcan los nanomateriales, mayores serán las posibilidades de combinar unas propiedades con otras “pero primero hay que conocer, investigar, incentivar a las nuevas generaciones y convencer a la política de que la ciencia es el motor del futuro”.

Galo Soler Illia nació en Buenos Aires, Argentina, estudió química en el Colegio Nacional de Buenos Aires en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, posteriormente realizó un doctorado con la tesis Mecanismos de precipitación de partículas monodispersas de precursores de óxidos mixtos en la misma universidad.

Hizo un posdoctorado en nanomateriales en la Universidad de París-Sorbonne, Francia; en 2003 fundó el grupo Química de Nanomateriales en la Comisión Nacional de Energía Atómica y es investigador principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas en Argentina.

Asimismo, es fundador del Instituto de Nanosistemas de la Universidad de San Martín en la Provincia de Bueno Aires, además Soler Illia realizó labores de divulgación científica al participar como columnista en un programa de televisión llamado Científicos, industria argentina y publicó el libro Nanotecnología. El desafío del siglo XXI.