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Confirman efecto de turbulencia en “La Noche Estrellada” de Van Gogh

Evelyn C. Ayala
31/may/2019

En 2008, mientras que decenas de personas contemplaban la icónica imagen de 'La Noche Estrellada' de Vincent Van Gogh, en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, un grupo de investigadores casi se iba de espaldas al encontrar algo fascinante: los trazos del pintor holandés coincidían con un efecto físico conocido como turbulencia.

Uno de ellos era el investigador del Instituto de Física, Gerardo García Naumis. Desde 2004, él junto con José Luis Aragón, del Centro de Física Aplicada de la UNAM, y Manuel Torres, del Instituto de Física Aplicada de España, se interesaron en la turbulencia, un fenómeno que surge cuando un fluido se agita desordenadamente ya sea en corrientes de agua o de aire e incluso en el medio interestelar.

Hace unas semanas, después de 11 años de aquel descubrimiento, un grupo de científicos australianos han confirmado la observación del 2008.

Al observar la turbulencia en fluidos, García Naumis, Aragón y Torres notaron que este fenómeno se parecía mucho a lo que algunos pintores como Van Gogh y Leonardo Da Vinci trazaban en algunas de sus obras. Así que decidieron analizar varias de estas pinturas.

Curiosamente, desarrollaban este trabajo cuando la NASA publicó imágenes de la estrella V838 Monocerotis (V838 Mon). Los mismos astrónomos, al observarla, la compararon con nebulosas galácticas “muy parecidas al cuadro de 'La Noche Estrellada'” de Van Gogh, decían.

'La noche estrellada'. GIF: Giphy.

Asombrados por la coincidencia, los dos mexicanos y el español se enfocaron en este cuadro que representa la vista desde la habitación de Van Gogh en el hospital psiquiátrico donde permaneció en la última etapa de su vida.

Lo que hicieron los investigadores fue analizar estadísticamente una imagen digital del cuadro de Van Gogh. Primero, obtuvieron su luminancia, es decir, la cantidad de luz que emite el cuadro cuando se le ilumina. Los colores de la pintura se llevaron a una escala de grises donde cada pixel tiene un valor diferente dependiendo de su tonalidad. Con esa información se encontró la diferencia de luminancias de los píxeles y los momentos estadísticos de la distribución.

Luego contrastaron sus resultados con el modelo de la turbulencia acuñado a mediados del siglo XX por el físico soviético Kolmogorov que explica cómo un fluido turbulento experimenta tres escalas: en la primera, se inyecta energía al fluido; en la segunda, los espirales se subdividen en espirales cada vez más pequeños; y en la tercera, la energía se disipa en forma de calor.

Vincent Van Gogh. GIF: Giphy.

Gerardo García Naumis cuenta a Noticias IFUNAM que casi se cae de la emoción cuando vio en la pantalla de la computadora que, en efecto, Van Gogh “se había adelantado unos 50 años en el entendimiento intuitivo del fenómeno de la turbulencia”, asegura.

Quiere decir que Vincent Van Gogh no sólo representó el movimiento en su obra sino que su capacidad de observación lo llevó a “reproducir de manera fiel las propiedades básicas de la turbulencia en fluidos”, dice el investigador del IFUNAM.

Fue tanta la emoción de los investigadores que difundieron en internet la investigación antes de que ocurriera la publicación oficial en la revista, lo que les valió una llamada de atención por parte de los editores. Cuenta Naumis que, además, la revista no permitió publicar la línea del tiempo que desarrollaron para demostrar que los cuadros artísticamente más complejos de Van Gogh se pintaron cuando sufría ataques psicóticos. La revista simplemente consideró que aquello era mera especulación.

A pesar de todo, finalmente en enero de 2008 se publicó el artículo titulado: “Luminosidad turbulenta en apasionados cuadros de Van Gogh” y varios medios informativos internacionales contaron al mundo la capacidad del pintor para representar fenómenos interestelares.

Gerardo García Naumis. Foto: UCIF.

“Era un trabajo fuera de lo común para la ciencia porque demostramos que Van Gogh había observado y capturado la esencia de ese desorden que está relacionado con la fractalidad, es decir, cuando algo se observa igual cuando lo ves a diferentes escalas”, dice García Naumis.

Sin embargo, el eco mediático de la publicación terminó pronto y no se habló mucho más del trabajo… hasta ahora.

Una confirmación que llega 11 años después

Hace un par de meses, una nueva noticia sorprendió a José Luis Aragón y Gerardo García Naumis. Los investigadores James Beattie de la Universidad Nacional de Australia, Canberra, y Neco Kriel de la Universidad Tecnológica de Queensland, también en Australia publicaron el artículo “¿La Noche Estrellada es turbulenta?”.

En él, describen que el cielo del pintor holandés contiene patrones muy similares a la turbulencia de las nubes moleculares, es decir, de las regiones interiores de las galaxias donde la densidad de la materia es alta y la temperatura es baja.

Artículo de Beattie y Kriel. Fuente: “¿La Noche Estrellada es turbulenta?”

Recientemente un reporte de la revista Physics Magazine de la American Physical Society (APS), publicó la nota “Arte y Cultura: Turbulencia en La Noche Estrellada”. Allí se indica que los remolinos del cuadro impresionista "tienen propiedades turbulentas que coinciden con las observadas en las nubes moleculares que dan origen a las estrellas".

Aunque el colega español de García Naumis, Manuel Torres, falleció hace unos años y no conoció la reciente noticia, con el trabajo australiano se confirma lo que descubrieron los investigadores mexicanos en 2008.

“Finalmente, después de muchos años, hay una verificación por otro grupo usando diferentes métodos y eso siempre es muy bueno, dado que siempre tienes la duda de si hiciste todo correctamente. Además, el trabajo está siendo leído otra vez”, platica García Naumis.

Para él, el arte y la ciencia comparten un mismo principio: la observación. Luego de observar viene la reproducción. Lo maravilloso es descubrir, después de tanto tiempo, que Vincent Van Gogh era un observador y un reproductor tan brillante que, muy probablemente sin saberlo, se acercó como nadie a la representación de la turbulencia con cada pincelada.