Evelyn C. Ayala8/dic/2023
Con una solemne ceremonia, se entregó hoy el Premio Jorge Lomnitz Adler al doctor Jesús Espinal Enríquez, del Instituto Nacional de Medicina Genómica (INMEGEN), la Medalla Fernando Alba, al doctor Horacio Martínez Valencia, del Instituto de Ciencias Físicas (ICF); y la Medalla Marcos Moshinsky, al doctor Axel de la Macorra, del Instituto de Física de la UNAM (IFUNAM).
En compañía del presidium, conformado por: la doctora María Soledad Funes Argüello, Coordinadora de la Investigación Científica; la doctora Mercedes Rodríguez Villafuerte, directora del IFUNAM y de la Fundación Marcos Moshinsky; el doctor José Antonio Seade Kuri, presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, y el doctor Saúl Ramos Sánchez, Secretario Técnico del IFUNAM.
“Es un orgullo, un placer y un privilegio estar por primera vez como Coordinadora de la Investigación Científica en el Instituto de Física, un instituto de los fundadores del Subsistema de la Investigación Científica de nuestra Universidad… Algo que siempre he admirado de los reconocimientos que otorga el IF es la generosidad que tienen no solo en el campo de la física sino también a gente que tiene que viene del área bio”, dijo la investigadora Soledad Funes, quien anteriormente fungió como Directora del Instituto de Fisiología Celular de la UNAM (IFC).
En esta edición del Premio Jorge Lomnitz Adler fue reconocido el doctor Jesús Espinal Enríquez quien actualmente es investigador en Ciencias Médicas, del área de Genómica Computacional del INMEGEN.
El doctor del ICF, Gustavo Martínez Mekler fue quien ofreció una breve semblanza del investigador galardonado. “Me da un enorme gusto que Chucho, con todas sus habilidades, es la segunda persona que siendo biólogo obtiene el premio y eso es algo que me da muchísima satisfacción”, aseguró Martínez.
El galardonado agradeció a sus estudiantes por “ser el corazón y el alma de esta labor, sin su dedicación y entusiasmo nada de lo que se ha logrado habría sido posible. Este premio no solo es mío, es de ellos también. Cada uno de ustedes ha contribuido con su esfuerzo y su pasión y este reconocimiento es el fruto de su trabajo y su dedicación. Los honro a cada uno con profunda gratitud y humildad”, dijo conmovido.
El galardonado de la Medalla Fernando Alba edición 2023 fue el doctor Horacio Martínez Valencia, del Instituto de Ciencias Físicas (ICF), quien fue presentado por la doctora Carmen Cisneros Gudiño, investigadora también del ICF.
Destacó que la labor del galardonado ha sido notable pues no solo ha impulsado proyectos en varias líneas de investigación: “significa generar el proyecto, comprar el equipo, instalar el equipo, entusiasmar a los estudiantes para que usen el equipo y además, crear infraestructura no tienen sentido sino generamos investigación de primera y en ese sentido la investigación del Dr. Martínez ha sido sobresaliente”, dijo.
Martínez Valencia agradeció a la doctora Cisneros por haber creído en él cuando fue su estudiante, también dedicó el premio a su familia, amigos, colegas, por ser parte fundamental en su desarrollo.
También dedicó unas palabras a sus estudiantes: “les agradezco desde el fondo de mi corazón y espero seguir contando con su apoyo en un futuro, este reconocimiento me inspira a seguir trabajando con humildad, compromiso hacia la excelencia de las ciencias experimentales”, dijo.
El doctor Axel de la Macorra, del Instituto de Física de la UNAM, fue reconocido con la Medalla Marcos Moshinsky y fue presentado por el doctor Jorge Cervantes Cota, del Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ).
“Durante las décadas que conozco a Axel, él ha utilizado su posición y autoridad para mejorar y ampliar la ciencia y la cultura mexicana”, destacó Cervantes Cota.
El galardonado, especialista en cosmología, recalcó la importancia que tiene estudiar el Universo: “Sabemos, por las leyes de la física moderna que no es posible viajar al pasado sin embargo, basta con mirar el cielo para que el pasado llegue a nosotros porque es precisamente lo que sucede cuando miramos los objetos celestes… Ver el Sol es ir ocho minutos atrás en el tiempo, ver el centro de nuestra galaxia es ir 50 mil años al pasado, y ver los cuásares y galaxias más lejanas es ir a la infancia de nuestro Universo”, explicó.
