Unidad de Comunicación

Noticias - Mariana Vargas Magaña: Reconocimiento Distinción Universidad Nacional para Jóvenes Académicos 2023

Mariana Vargas Magaña: Reconocimiento Distinción Universidad Nacional para Jóvenes Académicos 2023

Evelyn C. Ayala
19/feb/2024

Para comprender el Universo hay dos aspectos que lo explican: lo que se ve y lo que no se ve a simple vista, o sea la materia y la energía oscuras. Asimismo, para entender qué ha llevado a la investigadora Mariana Vargas a convertirse en una de las científicas más destacadas de las ciencias exactas, y en particular de la cosmología observacional, es imprescindible entender su desarrollo profesional, lo que se ve, y el personal, lo que casi nunca se ve de alguien.

Mariana Vargas Magaña recientemente recibió el Reconocimiento Distinción Universidad Nacional para Jóvenes Académicos (RDUNJA) 2023. En esta edición hubo 10 reconocimientos otorgados a mujeres y 5 a hombres, y el total de reconocimientos de las ciencias exactas fueron entregados a mujeres.

De acuerdo con la investigadora, recibir el RDUNJA es muy importante porque valora una nueva forma de hacer ciencia: la cosmología observacional. Destaca que se trata de una ciencia que requiere de la participación colaborativa con cientos de colegas de varios países para colocarse en la frontera del conocimiento.

“Este premio visibiliza la investigación colaborativa en las nuevas generaciones, motivando las carreras científicas de jóvenes en los grandes experimentos de energía oscura. La ciencia no es únicamente un proceso aislado ni productivista donde se evalúa de manera constante la producción científica en términos cuantitativos individuales. El quehacer científico es diverso, investigar tiene que ser un espacio donde se fomente la creatividad, la innovación y la colaboración”, dijo.

Ciencia básica y colaborativa para entender el Universo

La trayectoria de la investigadora ha concentrado esfuerzos en la energía oscura, es decir, esa energía misteriosa que ocasiona que nuestro Universo se expanda de manera acelerada aunque no se pueda detectar a simple vista. Se sabe que la energía oscura existe porque produce efectos observables en observatorios terrestres y espaciales.

Por la complejidad de detectar la energía oscura es que Mariana Vargas la analiza a través de sondeos espectroscópicos, lo que quiere decir que analiza las huellas del Universo cuando tenía características de un plasma. Esta información indica que, en efecto, el Universo se expande aceleradamente y que la causa es la energía oscura.

Para saber que esto sucede así, Vargas ha formado parte de grupos internacionales de investigación que realizan experimentos para analizar estructuras de gran escala. Lo explica así: “El Universo a escalas cosmológicas se asemeja a una esponja con huecos, filamentos y regiones con aglomeramientos, y para analizarlos, utilizamos telescopios terrestres que generan mapas de sus estructuras”, dijo la investigadora.

La inspiración de Mariana Vargas: lo que no se detecta a simple vista

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la motivación está impulsada por la curiosidad y “es lo que nos hace avanzar en la vida. Nos estimula a aprender y mejorar, y a establecer y cumplir objetivos”.

Para la investigadora, su interés por la ciencia se originó en la secundaria, cuando su maestro de física le recomendó leer “Historia del tiempo”, libro escrito por el científico Stephen Hawking.

“Cuando leí ese libro tuve ese sentimiento de entender algo tan grande, tan infinito como el Universo donde estamos inmersos. Ahora que lo veo en perspectiva, veo que no entendía gran cosa, pero ese libro se escribió de tal forma que el lector parece entender algunas ideas más abstractas en cosmología. Y de tener esa ambición de querer entender algo tan grande como el Universo, surgió esta espinita por estudiar física”, contó Vargas. Así, con un gran interés en comprender la naturaleza del Universo, Mariana Vargas estudió la licenciatura en física en la UNAM, un Máster en la Université Paris-Sud, y el doctorado en la Université Paris-Diderot.

Ahora, como académica y profesora, adscrita al Departamento de Física Teórica, del Instituto de Física de la UNAM, Mariana Vargas promueve la inclusividad y la equidad en la ciencia, especialmente en las ciencias exactas, históricamente masculinizadas. El Premio Nobel da cuenta de ello puesto que en 123 años de su historia, solo han sido galardonadas 24 mujeres en las áreas de las ciencias. Además, de acuerdo con los datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), en 2019 “la tasa mundial promedio de investigadoras era del 29.3% y apenas el 35% de los estudiantes de STEM en la educación superior eran mujeres”.

Para fomentar el cambio, Mariana Vargas ha participado en diversas iniciativas y comités, por ejemplo el Comité de Género del Posgrado en Ciencias Físicas de la UNAM, y el Comité de Inclusividad Sloan Digital Sky Survey (COINS), y el Comité de Diversidad e Inclusividad del Instrumento Espectroscópico para el Estudio de la Energía Oscura (DESI, por sus siglas en inglés).

Asimismo, participa y co-organiza diversas iniciativas como CUWIP-México, que tiene como objetivo ayudar a las mujeres universitarias a continuar sus estudios en física proporcionándoles información sobre escuelas de posgrado, por ejemplo. Además brinda el acercamiento con científicas de la física para compartir experiencias e inquietudes relacionadas con la ciencia.

“En cuestiones de inclusividad y equidad de género aún tenemos mucho que avanzar para que la academia sea un espacio donde se tenga igualdad de oportunidades para todas las personas pero estamos contribuyendo para que esa transformación ocurra”, asegura Vargas.

Ser ejemplo de las generaciones futuras de investigadoras es también una de las tareas más importantes para Mariana Vargas. Con el RDUNJA, la investigadora planea continuar con la formación de estudiantes en el campo de la cosmología observacional y motivar a las generaciones más jóvenes, en particular a más mujeres y minorías en las carreras STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics, por sus siglas en inglés).

Contrario al estereotipo de la imagen del o la científica, Mariana Vargas no trabaja de forma aislada en su escritorio sino que busca constantemente la colaboración con colegas y estudiantes, lo que le ha permitido generar conocimiento valuable no por cantidad sino por el impacto científico de sus resultados, por ejemplo, participar en el mapeo más preciso del Universo.

Por otro lado, la investigadora realiza otras tareas que no necesariamente se relacionan con la física, la ciencia, o la cosmología. Gusta de viajar y eventualmente realiza actividades físicas al aire libre como paseos en bicicleta y salir a caminar con sus perros, Corner y Onix.

Entre sus objetivos más personales se encuentran retomar sus lecciones de violín y las prácticas de yoga, unirse a un grupo de senderismo y trepar montañas. Igualmente tiene interés en montar un proyecto con impacto social directo aplicando los conocimientos aprendidos en su especialidad o, incluso, otra especialidad distante a su formación como: estadística a problemas sociales y ambientales.

Así, la investigadora se ha convertido en una referencia en las ciencias exactas bajo tres aspectos que considera clave: desarrollo científico a través de la participación colaborativa, intervención en propuestas e iniciativas para incluir a más mujeres en la ciencia, y desarrollo humano a través de la recreación para conseguir beneficios físicos y mentales.

Foto: Gaceta UNAM