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Con una tecnología compuesta por un detector de muones (partícula elemental 200 veces más pesada que el electrón y no estable) físicos liderados por Arturo Menchaca, del IFUNAM, descartan la presencia de tumbas al interior de la pirámide del Sol, lo que los ha llevado a plantearse hipótesis alternas: posibles enterramientos bajo los hogares de los gobernantes o debajo de complejos palaciegos.

Pero los estudios no han sido en vano: han descubierto que la parte sur está más seca y que la parte norte está húmeda, lo que puede traer como consecuencia un posible hundimiento paulatino tal y como sucede con el subsuelo de la Ciudad de México.

En su charla “Estudio Interdisciplinario del pasado de Teotihucan”, en el marco de los festejos del 75 Aniversario del Instituto de Física, Menchaca refirió que la metodología será empleadapara realizar estudios geofísicos sobre el volcán Popocatepetl, para determinar más información que ayude a la prevención de una posible erupción.

Fuente: Academia Mexicana de Ciencias (Boletín AMC/061/14, 21 de febrero de 2014).